viernes, 6 de mayo de 2011

"¡Qué pereza! Con lo sencillo que es..."

La pereza de sobreponerse a la dificultad propende a convertirse en la dificultad de sobreponerse a la pereza.

3 comentarios:

an dijo...

completamente de acuerdo, pero es que últimamente casi todo se me hace una gincana... ya te dije, la vida me cansa... pero el cansancio no me da vida :-S
a ver si termina, de una puñetera vez, esta sensación de estar de exámenes y me doy unas vacaciones reales... aunque quizá debería primero dejar de de echar culpas a la crisis económica y a la inmadurez de los llamados "hombres"...

Francisco Sianes dijo...

Pues... si te sirve de algo mi experiencia, creo que deberías asumir unas cosillas: la crisis (económica o no) es consustancial a la vida, los hombres (todos) resultamos inmaduros a la corta o a la larga (claro que las mujeres tenéis otros déficits de serie...) y, sobre todo, en los asuntos en que media la elección, acabamos encontrando lo que (acaso oscuramente) andábamos buscando.

Un abrazo, perezosa.

an dijo...

sabias palabras