miércoles, 19 de noviembre de 2008

Anoche

No moriré, amor mío, de fiebre calculada.
Haberlo amado todo antes de amarte,
qué perfección ahora tan inútil.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

He leído por ahí:

Hay quién ha venido al mundo para enamorarse de una sola y determinada persona y, consecuentemente no es probable que tropiece con ella.

Toda perfección es inútil, cuando uno se da de lleno en toda la jeta, con esa persona.

Volveré con otro navío.

Besos a vos y a la bella damisela :)

Francisco Sianes dijo...

Querida piratilla,

Quien ha venido al mundo para amar sólo a una persona ha venido a no amar nada (esto puede -debe- leerse a la inversa).

Un abrazo muy cariñoso.

***

Y disculpad todos por no responder a vuestros comentarios. Sin internet, entro siempre para publicar a toda prisa algún suspirillo lírico.

Pero amenazo con volver en plena posesión de mis poderes.

Abrazos inmoderadamente sentimentales.