Hay tardes enteras que ha pasado hojeando -sin apenas leer, por el entrañable placer de acariciarlos, olerlos, tenerlos cerca- los manoseados volúmenes de sus estanterías. Rara es la semana que ha dejado pasar sin escribir a mano una carta a un antiguo maestro, al que un día temió y hoy aprecia. Alguna vez, algún vecino curioso podría descubrirlo en ensimismada contemplación tras la ventana; podría acaso pensar que alguna melancolía lo aturde o acosa: él sólo escucha una música lejana o el calmado discurrir de sus ritmos interiores. Nunca un café se alargó como aquel que compartía con ella las soleadas e infinitas mañanas de domingo, a la sombra del árbol que plantara su abuelo. Nadie encontrará con más facilidad una excusa para interrumpir sus paseos por la playa en penumbra, tal como los interrumpía con ella, ahora que ella le falta. Jamás un latido ha durado tanto. Sin duda, observadores imparciales que nada saben ni quieren saber de él dictaminarían, con justicia, que ha perdido el tiempo. Él, si tuviera el valor de contestar, sin exigirles comprensión y con no menos justicia, sostendría que ha ganado una vida.
9 comentarios:
Mirada hacia lo incietto... Las manchas ¿están ante sus ojos o a su espalda?...
Espero que el año nuevo le traiga renovadas energías para mantener sus escritos al día, que hacía más de un mes que no se dejaba usted leer.
Un saludo
sí, sonreir al nuevo que nos saluda... o mejor, saludar al nuevo que nos sonríe.
Por las manchas, Ana, reconocemos el tiempo, las lágrimas, lo imposible. Por tus palabras, la alegría.
Un abrazo al filo de lo posible.
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Doscontratrés,
Me alegra mucho verlo de nuevo por aquí. A partir de enero/febrero intentaré tener esto más al día. Por cierto, ¿no tiene usted página personal?
Un abrazo cargado con buenos deseos.
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An,
Tú, como todos los instantes privilegiados, sí que mereces ser recibida con una sonrisa.
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Elena,
Ya que no un lindo gatito, siempre puedes ofrecerme un cascabel. Claro que vas a tener que sonreír muuucho más para que te deje ponérmelo. ;)
Paso de cascabeles, que luego me despiertas por las noches.
Señorita,
¿Acaso aventura usted que yo la dejaría dormir con o sin cascabel?
[Por cierto, ¿no tiene usted página personal?]
[¿Acaso aventura usted que yo la dejaría dormir con o sin cascabel?]
Jeje, tienes tu gracia y todo, menos mal que los de la fama de malafollá (perdón) somos los granainos ;)
Ahora lo llaman ironía, fíjate tú, que cosas ¡eh!
Hala, otro beso :)
Olvidé comentar la pregunta.
Cómo diría mi admirado Capitán Sparrow: "Son momentos, salúdalos mientras los ves pasar".
Que listo es, que listo ¿verdad?
Annabel,
La "malafollá" de los granaínos y las granaínas habría que ponderarla una a una (si es que uno tuviera la energía y el corazón suficiente para ello).
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