lunes, 14 de enero de 2008

Mi poesía es un arma cargada de futuro

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta es la típica fotografía de "sin comentarios" :-D
Muy buena... pero deje caer la venda (o la modestia), no sea tímido.
Un beso.

Francisco Sianes dijo...

No es timidez, Ana: protejo mis partes pudendas.

Un abrazo.

Sir John More dijo...

Uy, a usted le cortan el cañón cualquier día de éstos. Que no todas sus admiradoras van a ser tan elegantes y consideradas como nuestra Ana...

Anónimo dijo...

... y de un poco de soberbia, ¿no cree? Acabo de echarle un vistazo exhaustivo a su blog, y veo que su círculo de intereses peligrosamente se va estrechando: de sus magníficos y observadores artículos sobre la literatura pasa usted a escribir casi exlusivamente sobre sí mismo... Una pena; un verdadero poeta tiene que observar detenidamente el mundo para poderle ofrecer algo...

Francisco Sianes dijo...

Anónimo*,

Hable de lo que hable, uno está condenado a hablar siempre de sí mismo. Yo diría, de hecho, que si por algo se ha caracterizado este blog es por ser un autorretrato constante y fatigoso de su autor.

Por otra parte (y en contra de lo que pretendía en un principio), apenas he escrito aquí sobre literatura. El motivo, sin duda, es que me conozco y sé que, si empiezo a escribir sobre los libros que leo, me va a pasar como en el reciente artículo sobre Sloterdijk: que un pequeño capitulito me ha llevado a escribir un elefantiásico texto.

Si siguiera mis inclinaciones naturales, escribiría un borgiano libro de arena (esto es, infinito) sobre cada libro que leo. Y tampoco se trata de castigar más de lo imprescindible a los pacientes lectores de esta torre.

Sea como sea, procuraré moderar el narcisismo. Sepa que aquí las críticas siempre son bienvenidas.

Un cordial saludo.

*[Si no tiene inconveniente, emplee usted un nick cualquiera: que con los anónimos se vuelve uno loco. Nunca sé si contesto al mismo o a siete...]